La tasa de crecimiento cero es algo que Singapur tiene que hacer esencialmente: abarca un área total más pequeña que la ciudad de Nueva York, como señala Bloomberg, y sin embargo, ha dado más del 12 por ciento de su superficie total a las carreteras hasta el momento. La decisión de limitar los autos nuevos en la carretera se debe a que no hay suficiente tierra para una mayor expansión de carreteras.
Este nuevo tope no se aplica a los vehículos de transporte público y autobuses, que continuarán pudiendo crecer al 0,25 por ciento anual hasta al menos 2021. También revisará el tope de todos los vehículos en 2025.
Singapur no es el único que enfrenta el desafío de que haya demasiados automóviles en el camino y demasiadas demandas de infraestructura como resultado. Pero es un ejemplo particularmente conmovedor de lo que sucede cuando se llega a un punto de crisis, y es un buen caso de ejemplo para ver por qué hay un enfoque en servicios de movilidad y de transporte alternativos, particularmente para entornos urbanos densos.
Fuente: Techcrunch.com
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