Sí para algunos manejar el tablero de un auto normal ya es un reto, imagina manejar solamente un volante de Fórmula 1. No es un secreto que los volantes de la F1 moderna son un verdadero rompecabezas, una completa obra de ingeniería. Multitud de botones, palancas e interruptores permiten al piloto modificar diversos aspectos del auto y buscar el punto dulce al monoplaza con el que pretenden alcanzar la gloria.
Los autos de Fórmula 1 son máquinas extremadamente complejas, donde el volante es la expresión más visible de todos los sistemas que operan en el auto. Para que un piloto pueda conducir estos autos de máxima categoría, la comprensión de su volante y las posibilidades que le ofrece es una de las tareas más complicadas.
De hecho, es tanta la complejidad de un volante de Fórmula 1 que no existen dos iguales. Es decir, jamás utilizarán los mismos volantes dos equipos en el mismo campeonato. Por ende, las comparaciones del tipo de manejo de los pilotos dependen mucho de su adaptación al volante.
Una de las actuales estrellas que tiene la Fórmula 1 es Charles Leclerc, el piloto monegasco es miembro de la Academia de Pilotos de Ferrari desde 2016, fue ganador del Campeonato de Fórmula 2 de la FIA con el equipo Prema en 2017. Debutó con el equipo Alfa Romeo Sauber F1 Team en 2018 y desde 2019 es piloto de la Escudería Ferrari.
En el Autorsport International Show 2020, el monegasco narró cómo tuvo que gestionar él ese aprendizaje, mencionó: “Cuando llegué por primera vez a la F1, tenía un libro de 70 u 80 páginas que aprenderme. Pero soy malo estudiando y aprendiendo cosas“, explicó. “Así que básicamente decidí formarme más en el simulador, echando horas y horas”.
Al final, la práctica permitió interpretar mejor la teoría: “Así es más natural, porque lo que está en el volante son cosas que usas durante la vuelta de clasificación o durante la carrera y que ayudan bastante al rendimiento. Así que son cosas que necesitas saber”.
Notablemente, Leclerc es un maestro de la práctica que evitó los grandes libros de teoría que pueden llegar a tener hasta 150 páginas, y en su lugar utilizó el simulador que lo llevaba a una experiencia más cercana a la realidad.
De todas formas, después de ver los resultados de las temporadas pasadas podemos concluir que Leclerc aprendió muy rápido Y, al llegar a Ferrari, tuvo que memorizar nuevos botones. De hecho, en los bólidos de Maranello hay diferencias incluso entre los volantes de sus dos pilotos. Charles decidió tener los mismos controles que su veterano compañero Vettel, naturalmente con diferentes ubicaciones. Por ejemplo, Leclerc maneja la palanca del embrague en la derecha, mientras que Vettel la tiene a la izquierda. Mira el video.