Test Drive: Jean-Pierre Michelet pone a prueba el nuevo Toyota Prius 4G

El nuevo Toyota Prius 4G es el ícono de los autos ecológicos a nivel mundial. Lanzado por primera vez al mercado en 1997, fue el pionero de los autos híbridos y, 21 años después, Toyota presenta la cuarta generación de este fabuloso vehículo del que he tenido la oportunidad de hacer un test drive a fondo.La experiencia de usarlo destaca incluso antes de entrar en él, pues en este auto nos encontramos con tecnología de punta desde un inicio. Con la llave en una mano y la otra mano en la manija, inmediatamente los seguros se levantan para poder abrir las puertas.

Amplio espacio interior

La impresión que tuve al subirme por primera vez al Prius 4G fue realmente futurista: me gusta la cantidad de gadgets que tiene. Radio JBL de 10 parlantes, cámara de retro y el climatizador inteligente, que tiene sensores de cada uno de los asientos para promediar la temperatura ambiente. Siguiendo el recorrido por el tablero de instrumentos, se encuentra la palanca de cambios y, debajo de ella, se ubica el cargador inalámbrico para el celular.

Ecológico y eficiente

El nuevo Prius 4G tiene un motor atmosférico de 1800cc cuyo torque viene por el lado del motor eléctrico. El torque es esa fuerza de desplazamiento del pique. ¿Cómo funciona esto? Normalmente, cuando se pisa el freno, se genera energía cinética que es desperdiciada. En el caso del sistema híbrido, esta energía se aprovecha para recargar las baterías que le dan la potencia al motor eléctrico. Es por esto que el auto híbrido consume mucho menos combustible en la ciudad que en carretera. Esta combinación nos da una fabulosa autonomía de 90 kilómetros por galón.

Alto nivel de estabilidad

Una de las cualidades que más me ha gustado e impresionado de este Toyota Prius es su suspensión independiente. El diseño está muy bien logrado. Es un auto sumamente estable, entra muy bien en las curvas y no tiene mucho rolido, lo cual hace que el vehículo transite muy firme en adherencia.

Seguridad a todos los niveles

Hablando de la seguridad, otras de las cosas muy importantes de este automóvil es que tiene 9 airbags y, en los costados, cuenta con barras laterales contra colisiones. Pero no es el único aspecto que en Toyota han tomado en cuenta dentro de este tema.

Siempre será un problema de seguridad el tener que bajar la vista al tablero para ver a qué velocidad se viaja. En este vehículo se puede ver directamente en el parabrisas la información sobre la velocidad de marcha gracias a la incorporación del sistema HUD (Head-Up Display), una tecnología similar a la utilizada en la industria militar. Esto generalmente se ve en autos de muy alta gama. En este caso, Toyota ha incluido esta tecnología en su Prius 4G.

Frenos de gran respuesta

Al igual que su destacada estabilidad, el sistema de frenos se encuentra en línea con el gran rendimiento del auto. Lo encuentro sumamente potente, incluso a ratos demasiado sensibles. Por lo tanto, hay que aprender a sentirlos para poder disfrutar plenamente de su respuesta.

La garantía más extensa del mercado de autos híbridos

Toyota está ofreciendo actualmente hasta 8 años o 160 mil kilómetros, lo que ocurra primero, de garantía. Y no sólo eso, ya que además de esa garantía la primera reposición de las baterías híbridas, tan costosas en el pasado, resultan ser prácticamente “gratuitas” debido a que están dentro de esa cobertura de 8 años o 160.000 kilómetros.

Beneficios impositivos

Por si todo lo anterior no fuera suficiente, el Toyota Prius 4G goza de unos beneficios en Ecuador en lo que a aranceles e impuestos de importación se refiere. Gracias a ello, su precio al público es de $ 33.990. En mi opinión, un valor muy atractivo frente a las bondades y prestaciones que ofrece.

Con más de 10 millones de unidades vendidas en todo el mundo, el Prius es el líder indiscutible en su segmento. Y deja además un legado muy importante en lo que a conciencia de la preservación del medio ambiente se refiere. Sin lugar a dudas, es un automóvil conveniente en todos los aspectos que se analice.

Fotografía: Esteban Salcedo y Diego Segovia Gómez.