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La décima sexta válida por el Campeonato Mundial de Fórmula 1 2018 le correspondió al Gran Premio de Rusia, en el citadino circuito de Sochi, el cual ha sido reducto Mercedes desde que la Fórmula 1 llegó a territorio ruso en 2014, es decir, en paralelo a la era turbo – híbrida de la nueva F1; y en esta ocasión no fue la excepción: Nueva victoria de Mercedes, y nueva también para Lewis Hamilton, pero no sin un poco de controversia a la interna del equipo alemán ya que, el ganador, en realidad, debió ser el otro piloto Mercedes, Valtteri Bottas, y no Hamilton, quien se benefició de las siempre polémicas órdenes de equipo para esta nueva victoria que viene a ser la octava del año para el británico, y la # 70 en F1.
A este paso, será solo cuestión de dos o tres años para que Hamilton alcance las 91 victorias de Michael Schumacher. Por el lado de Mercedes, 5 victorias en Rusia con 3 pilotos diferentes: 3 con Hamilton, una con Nico Rosberg y también una con Bottas siendo que fue precisamente en Sochi en donde el finlandés obtuvo su primera victoria en F1.
Un par de carreras atrás estaba claro para todos que el auto más rápido en pista era el Ferrari, y que si Sebastián Vettel no estaba liderando el campeonato era debido a sus propios errores así como a los de su equipo, principalmente en términos de estrategia de carrera pero, a partir del Gran Premio de Singapur Mercedes ha demostrado claramente que ha retomado la supremacía sobre Ferrari gracias a un mejor desarrollo de su chasis, y lo ha hecho en el momento preciso para empezar ya a sentenciar un nuevo campeonato en su favor, tanto a nivel de constructores como de pilotos gracias fundamentalmente a un Lewis Hamilton en la “cima de su arte”, hoy por hoy, el mejor piloto de la Fórmula 1 y, sin duda, uno de los mejores de la historia; esto al contrario de una errática escudería Ferrari así como su piloto Sebastián Vettel, que no han sabido llevarse todos los puntos que debieron cuando el SF – 71H era claramente superior al W-09 de Mercedes.
Si, en lo que resta de la temporada, la tendencia se mantiene con este auto alemán rápido y confiable, y un Hamilton Implacable, veloz e imperturdable, que no comete errores, el nuevo título para la escudería de Stuttgart es solo cuestión de tiempo, por lo que, desde ya, cuánto le está costando a Vettel ese infantil abandono tras despistarse en Alemania cuando lideraba cómodamente la carrera, frente a su público. Allí se le fueron 25 puntos, más 7 por los solo 18 puntos que hubiese sumado Hamilton por finalizar segundo y no primero; hoy, la diferencia entre ambos sería de únicamente 18 y no de 50 puntos, con lo cual la definición del campeonato estaría al rojo vivo. Pero, insisto, esta segunda parte de la temporada ha sido ampliamente más favorable para Mercedes siendo que Lewis ha ganado en 5 de los 6 últimos Grandes Premios.
De todas maneras, en Sochi, principalmente con Vettel, Ferrari le complicó más de lo que anticipamos la victoria a Mercedes luego de que en la clasificación Bottas y Hamilton fueron medio segundo más rápidos que Vettel y Raikkonen. Con semejante diferencia pensamos que la carrera iba a ser un paseo de Valtteri y Lewis, pero no, el ritmo de competencia de los de Maranello fue prácticamente el mismo, a tal punto que, tras el cambio de llantas en pits, Ferrari logró poner de vuelta a la pista a Vettel justo por delante de Hamilton pero, un giro más tarde y con llantas algo frías aún, Sebastián cometió un leve error al entrar a la recta principal, error que fue inmediatamente aprovechado por Lewis para pasarlo y recuperar así el segundo puesto. En un principio, el de Ferrari defendió bien su posición, al límite pero dentro de lo legal. Sin embargo, en la frenada de la siguiente curva, Hamilton volvió a atacar y esta vez ya no hubo nada que hacer para Vettel, el Mercedes se coló por delante de su Ferrari.
A partir de allí, entonces, llegó la siempre polémica orden de equipo, orden dada directamente por el director del equipo Mercedes, Toto Wolf, para que Bottas le cediera la punta a Hamilton en función de que Lewis está peleando por el campeonato y Valtteri, no.
Las órdenes de equipo para los pilotos siempre han existido y siempre existirán, y son lógicas partiendo del principio de que todos los miembros del equipo de una escudería de carreras se debe a él, por lo que todos trabajan en función de lo que el equipo necesite y, de acuerdo a ello, la decisión que tomó Toto Wolf fue la correcta para poder asegurar aún más el liderato de Hamilton en el campeonato frente a Vettel. Claro, por el otro lado, muchos dirán que con toda la diferencia que Lewis ya le ha sacado a Sebastián en los puntos, Mercedes debió permitirle a Bottas que ganara la carrera, al fin de cuentas, Valtteri viene trabajando en favor de Hamilton desde hace algunas carreras atrás por lo que, se merecía esa victoria , y sin duda que se la merecía por lo que hizo esta vez en la pista pero, la pregunta es: ¿Y qué pasa si Hamilton sufre un abandono por accidente o falla mecánica (ya le pasó en Austria), en el próximo GP, y Vettel gana, con lo cual la diferencia caería de 50 a 25 puntos de un plumazo con 4 carreras y 100 puntos aún por delante?
Puede suceder, las cosas pueden cambiar dramáticamente de un momento a otro. Por lo tanto, en lo personal, considero que Mercedes hizo lo correcto al invertir las posiciones de sus dos pilotos ya que, así aseguró cada punto posible para Hamilton ante cualquier eventualidad en lo que resta del campeonato puesto que, son algunas las veces que hemos visto como el “pan se le ha quemado en las puertas del horno” al piloto que, teóricamente, tenía el título “en el bolsillo”, en favor de su rival. Falta mucho todavía, 5 carreras, 125 puntos, y Mercedes no quiere correr ningún riesgo, lo cual es lógico.
De hecho, es Ferrari el que no ha sabido trabajar en función de su equipo, en función de Vettel. Mucho se le ha criticado a Raikkonen por no ayudar a su coequipero pero, el error no es del finlandés, es de su equipo que no se lo ha pedido cuando ha debido a diferencia de Mercedes que cada vez que ha considerado necesario se lo ha solicitado a Bottas sin titubear tal como fue el caso en Rusia, así esto signifique que Valtteri deba sacrificar una victoria por demás merecida en favor de su “compañero de banca”.
Indudablemente que en Mercedes hubiesen preferido que Hamilton ganara desde la Pole Position para así evitarse esta siempre escabrosa y complicada situación en que se ven obligados a pedirle a uno de sus pilotos que deje pasar al otro, pero debemos entender que a partir de que uno de los dos pilotos tiene opciones de ser campeón y el otro no, este último está intrínsecamente obligado a trabajar en función del que sí tiene opciones. Claro, esto al contrario de lo que sucedía en Ferrari durante la era Schumacher en que se le pedía a Rubens Barrichello ceder su posición en favor de Michael desde las primeras carreras de la temporada cuando el campeonato aún estaba abierto para ambos. Ese fue el escándalo del mal recordado Gran Premio de Austria 2002 en que Rubens le dejó pasar a Schumacher sobre la línea de meta tras pedido del equipo. Posteriormente en el campeonato, el alemán le devolvió la atención al brasileño en el Gran Premio de Estados Unidos, y seguramente que Hamilton hará lo mismo con Bottas si la oportunidad se presenta de aquí al final de la temporada y si el título ya está en el bolsillo del británico.
Pero, en Sochi, hubo otro piloto que se destacó más que cualquier otro, y ese fue Max Verstappen. Obligados ambos Red Bull a largar desde el fondo de la grilla por cambio de motor, al haber superado así el número de solo 3 motores por piloto por temporada, el joven holandés realizó una remontada digna únicamente de un extraordinario campeón. Solo en la primera vuelta Max ya pasó a 7 autos, y en cuestión de 8 giros ya era quinto, únicamente superado por los dos Mercedes y los dos Ferrari. ¿Qué hubiera sucedido si es que Max largaba adelante? A mi no me queda la menor duda que el ganador de este Gran Premio ruso pudo haber sido Max Verstappen. Es impresionante el talento que tiene este “jovencito” que acaba de cumplir apenas 21 años. El día que Max tenga entre manos el mejor auto del pelotón, será simplemente intratable, ¡Inalcanzable!