Pero, ¿qué vuelve tan interesantes a estas súper máquinas de carreras, que se preparan para cruzar Paraguay, Bolivia y Argentina a toda velocidad?, te contamos los detalles a continuación:
Se tratan de camiones de tracción 4×4 con dos ejes y un enorme recubrimiento en la parte de atrás que, lejos de lo que se pueda pensar, es solamente una carcasa gigante que protege una serie de repuestos que el equipo en pista puede requerir en caso de reparación, cambio de llantas o cualquier tipo de emergencia.
El inventario dentro de la parte posterior del camión varía según cada equipo, dentro del cual se contempla llantas de repuesto, planchas para ayudar a desatascar cuando el camión queda varado en la arena, extintores, tanques de gasoil, cajas con repuestos (incluido hélices), herramientas y bombonas de aire comprimido para inflado de neumáticos.
Toda esta indumentaria va recubierta por los paneles laterales que revisten el chasis, pero lo interesante es que debe ser colocada de forma tal que permita equilibrar el peso del camión, de tal forma que no se vaya en picada en una pendiente o durante un salto, incluso se debe prevenir que caiga hacia atrás al salir de la cresta de una duna, y es que es necesario tener presente que el Dakar implica atravesar ríos, escalar montañas y rodar por campos sumamente extremos.
El verdadero desafío viene cuando hay que movilizar un vehículo de 9.000 a 11.000 kilogramos de peso a una velocidad máxima que va de los 140 km/h a 160 km/h, con propulsores que alcanzan de 900 a 1.200 CV de potencia y caja de cambios manual de 16 velocidades.
Los motores también son algo muy grande, anteriormente podían llegar a ser de 18.2 litros, los cuales perfectamente podían mover un barco (y eran utilizados para ese propósito), pero la FIA decidió que el máximo permitido para el Dakar sería de hasta 16 litros.
La velocidad por reglamento fue limitada a un máximo de 140 km/h por motivos de seguridad, aunque el nuevo KAMAZ, que no compite este año en el Dakar, alcanza velocidades máximas de 163 km/h y aceleración 0-100 km/h en menos de 10 segundos, cifras grandes tratándose de un camión.
Un dato interesante, los T4 cuentan con un piloto y dos copilotos, lo que significa que el habitáculo tiene tres baquets o asientos de competencia dispuestos en la cabina. El asistente que se ubica a la derecha se encarga de la navegación, mientras que el especialista del centro hace labores como inflado y desinflado de las ruedas (sí, se puede controlar desde el tablero central), y controla un sistema automático de engrase para la transmisión, muy necesario en este tipo de vehículos.
Una vez especificados algunos detalles interesantes sobre los monstruosos T4, solo queda disfrutar de esta categoría en el Rally Dakar 2017, pues no cabe duda que una potencia tan titánica no hace menos que despertar pasiones a los aficionados del automovilismo.
Fuente: DiarioMotor