Diez equipos estarán luchando por el Campeonato Mundial de Fórmula 1 esta temporada, con los autos que la FIA, ha prometido, serán de hasta cinco segundos por vuelta más rápidos que sus homólogos en las primeras tres temporadas de la fórmula turbo-híbrido que comenzó en 2014.
Como parte clave del nuevo paquete, los neumáticos de Pirelli son un 25 por ciento más anchos que el año pasado, en búsqueda de un gran aumento en el agarre mecánico para compensar los importantes cambios aerodinámicos.
Las delanteras son casi el ancho de las anteriores, subiendo de 245 mm a 305, mientras que las elevaciones aumentan de 325 a 405. Su diámetro es también ligeramente más grande.
Sin embargo, igual de importante es que mientras que Pirelli suministrará el habitual compuesto de caucho duro, medio, suave, superblando y ultrablando, los compuestos individuales son diferentes a los de 2016 y el objetivo ha sido hacerlos mucho más duraderos para que los conductores puedan acelerar más y más.
Aún no sabe si los neumáticos se degradarán a un ritmo más lento que sus predecesores, como promete Pirelli. Pero algunos pilotos, cuyos autos estaban bien preparados en las pruebas españolas, se mostraron entusiasmados con la dureza y mayor cantidad de tiempo que podrían acelerar antes de que el rendimiento del caucho se deteriorara. Sin embargo, a su vez, todavía no parece haber los mismos beneficios de tiempo de vuelta entre los blandos y superblandos, y entre los superblandos con los ultrablandos. Esto puede haber sido debido a las zonas de temperatura en las pruebas que afectan a sus rangos de trabajo individuales y la eficiencia.
Las nuevas máquinas son definitivamente más difíciles de manejar, como se esperaba y con su descarga aerodinámica significativamente mayor, y por lo tanto son visualmente más emocionantes de ver.
Lewis Hamilton, de Mercedes, admitió que sintió físicamente la diferencia al final de la primera mañana de pruebas a finales de febrero, después de completar 73 vueltas. “Estoy encontrando que el auto es mucho más físico para conducir que en el pasado”, reveló. “Es mucho más rápido en las curvas, la fuerza que sientes en tu cuerpo y en tu cuello es mucho mayor, tengo moretones y golpes donde nunca los tuve antes”.
En el pasado, el acento estaba en los pilotos que presentaban un peso mínimo para que los ingenieros compensaran, pero ahora han estado entrenando para desarrollar los músculos que necesitan para hacer frente a las fuerzas más grandes.
Hasta ahora, los observadores están de acuerdo en que los autos parecen y suenan mejor en pista, aunque como de costumbre una máquina que realmente se está conduciendo bien, con un buen equilibrio minimizando el subviraje y sobreviraje, permite mantenerlo bien plantado delante y detrás, incluso cuando el conductor está acelerando fuerte. Un auto, correctamente equilibrado y conducido, se ve menos dramático que uno que se desliza visualmente de un extremo a otro, ya que entrega mejor agarre.
Si las pruebas se toman a su valor nominal, Ferrari comienza favorito con Mercedes y Red Bull muy cerca, y Williams encabezando el apretado medio campo que incluye a Force India, Toro Rosso, Renault y Haas. Pero en esta etapa temprana, la fiabilidad será tan importante como la velocidad, que favorecerá a Mercedes y Ferrari.
Fuente: Formula1.com
Fotos: Getty Images