Barack Obama se convirtió este año en el tercer Presidente de la historia de EE.UU que visita el Detroit Auto Show, antecedido por Bill Clinton en 1999 y Dwight D. Eisenhower en 1960.
Durante su recorrido por la exhibición paró en los stands de marcas como Fiat Chrysler, Fordy el alemán ZF; pero el modelo que más llamó su atención provino de la General Motors, dándose tiempo incluso de sentarse en la cabina del nuevo Chevrolet Volt EV 2017, un auto eléctrico tipo hatchback, que posee una batería que dura un recorrido de 320 km sin recargar, y que según el fabricante norteamericano entrará a producción masiva a finales de este año.
A pesar que durante su mandato el Servicio Secreto de EE.UU. no permite que Obama conduzca un auto por motivos de seguridad, el Mandatario aseguró que al dejar la Casa Blanca definitivamente comprará un Volt EV, lo cual no es extraño ya que personalmente apoya la creación de vehículos eléctricos, como una forma de reducir emisiones de carbono y alivianar el cambio climático.
El recorrido del Presidente de EE.UU. por el Detroit Auto Show también incluyó felicitaciones de su parte al sector automotriz, que se ha recuperado de una dura crisis que en el 2009 implicó la quiebra de dos fabricantes automotrices, que requirieron rescates financieros por parte del Gobierno estadounidense para salvar miles de empleos.
El año pasado la industria automotriz estadounidense llegó a su más alto nivel con 17,39 millones de autos vendidos, aproximándose al record que este sector alcanzó en el año 2000, lo que consiguió duplicar la producción de ese país al doble en relación al 2009, alcanzando 646.000 nuevos empleos, y un total de 900.000 nuevos empleos desde el punto más bajo de recesión de ese país.
Durante la campaña de Obama en 2008, el estableció como meta que, para fines del 2015, Estados Unidos tendría 1 millón de autos eléctricos en sus carreteras, pero el número alcanzado fue de casi 400.000 unidades hasta el 31 de diciembre del año pasado. Una proyección de 2012 indica que el objetivo de Barack Obama podría ser alcanzado en 2018.