El fabricante alemán tiene presente que uno de los detalles que los diferencian frente a otras marcas es la experiencia placentera que tienen sus clientes al conducir sus autos, de tal manera que, en el Visión Next 100 los ingenieros de BMW no han dejado de lado la idea de que el propietario pueda estar al mando cuando lo desee. “El mundo cambiará, pero el placer de conducir persistirá”, dicen los visionarios de BMW.
Dos modos de conducción del Visión Next 100
BMW imagina que para conseguir este propósito su auto tendrá dos modos de conducción: Boost para operación humana y Ease para autoconducción. El centro del desarrollo del BMW Vision Next 100 se centra en la capacidad del propietario para manejarlo, aunque contará con los detalles hacia los cuales evolucionan los vehículos autónomos.
En modo Boost, el auto se concentra en el piloto y lo apoya con sistemas inteligentes, para mejorar la experiencia de manejo y precautelar la seguridad de los ocupantes y de personas en la calle. Al seleccionarlo, el volante sale desde el tablero y cambia la posición de la consola central y los asientos, de forma que se orienten hacia el conductor.
El parabrisas delantero es un head up display interactivo, que formará parte de la experiencia de manejo, donde el conductor podrá ver el trazado ideal de conducción, puntos óptimos de frenado, contacto y salida de curva, así como velocidad ideal para cada uno de esos puntos. Si el piloto circula en condiciones de clima adverso, como niebla o lluvia intensa, la pantalla genera una imagen digitalizada de la vía para mejorar la seguridad.
En modo Ease los pasajeros dejan el control al auto, pueden reclinar sus asientos y disfrutar. Desde el parabrisas se podrá disfrutar de contenidos personalizados, mientras el auto se moviliza al lugar solicitado. La experiencia al interior será mejorada por la inteligencia sensorizada con la que contará el vehículo.
BMW Companion
Para aprender de los gustos y necesidades de los usuarios, BMW Group planea desarrollar el producto BMW Companion, que consiste en un compañero de viaje virtual, que aprenderá de sus usuarios de forma personalizada, con capacidad de que la conducción se convierta en el centro de atención del auto cuando el piloto elija manejar.
Físicamente, Companion será el cerebro del BMW Vision Next y se ubica en la parte central del tablero que dará soporte al conductor en modo Boost, y asistiendo a los usuarios para mejorar su experiencia durante el modo Ease.
Además, Companion mantendrá comunicación con los otros autos en la vía, y avisará con una luz verde a los peatones para que puedan cruzar sin riesgo. Pero esto no es lo único, sino que BMW Companion podrá modificar la forma exterior del auto para que otras personas en la vía entiendan que el vehículo está en modo autónomo.
Geometría viva en la carrocería
Los ingenieros de BMW imaginan una carrocería que se adapta a cada momento con un recubrimiento llamado Alive Geometry, que recubre las ruedas y se adapta a sus movimientos cuando gira el volante, lo que permite un coeficiente aerodinámico de 0,18.
Cuando el conductor se aproxima al auto, el sistema de detección abrirá la puertas hacia arriba de forma automática. Al sentarse en su puesto, tocará el logo de BMW y el auto se encenderá. El volante y los mandos, en cambio, se retraerán cuando el piloto va a entrar o salir del auto o cuando elige el modo Ease.
Los materiales de construcción empleados serán mayormente fibra de carbono reciclada de líneas de producción anteriores de la marca, y se evita el uso de elementos como piel y madera, recurriendo a telas sintéticas fáciles de reciclar, así como a otros materiales que no comprometan el ecosistema.
La forma de fabricar autos será diferente en el futuro a los ojos de BMW, con la implementación de tecnología 4D, que consiste en formas más flexibles y que se adaptan a cada momento, lo cual es visible en el concepto de geometría viva que propone la marca en el Vision Next 100.