En los últimos años es frecuente es frecuente ver que subastas en las que se pagan cantidades desorbitadas por modelos que, hace apenas una década, cualquiera podía comprar por un módico precio. Te estamos hablándose de modelos como el Peugeot 205 GTI, Renault 5 Turbo y Clio V6…
Por tal motivo, hoy hemos preparado un top con 7 modelos increíbles que, dentro de unos años, se convertirán en preciados clásicos y, por lo tanto, multiplicarán su valor. De hecho, algunos de ellos ya han empezado a subir… Esperamos que te guste.
Aunque estéticamente no es relevante, de hecho, ni siquiera es atractivo. Sin embargo, este coupé biplaza fue el primer Alfa Romeo del siglo XXI que ofrecía un rendimiento equiparable al de los Porsche, Maserati o Ferrari. Bajo el capó, escondía un motor atmosférico de gasolina 4.7 V8 que desarrolla 450 CV a 7.000 rpm. Por desgracia, cada vez son más difíciles de encontrar.
Este vehículo es el hatchback urbano por excelencia y del cual tan solo se fabricaron 333 unidade,s y se vendieron por un precio de 53.600 dólares. Estaba equipado con el mismo motor 2.0 TFSI y sistema de tracción total que equipa el Audi S3 de la época, combinado con una caja de cambios manual de seis velocidades. ¿Sus prestaciones? Aceleraba de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y 245 km/h.
Tal vez estemos ante la versión más cara, rápida y potente del antiguo BMW Serie 1 Coupé, de hecho, es uno de los BMW favoritos entre los puristas de la marca bávara. Y no solo por su impresionante mecánica biturbo de gasolina, sino porque este coupé de tracción trasera es uno de los BMW con una puesta a punto más radical de los últimos años. En cualquier caso, era un automóvil tan rápido que podía competir, de tú a tú, con el M3 de la época.
En su época, no solo fue el compacto más deportivo, sino que además era el hatchback más rápido del mundo. Su motor turboalimentado de 2,5 litros, con cinco cilindros, le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos y alcanzar 265 km/h. Esta serie limitada a 500 unidades fue la versión más deportiva de la segunda generación del Ford Focus y, para muchos, el Focus RS más intimidante por diseño. Espectacular.
El Honda S2000 es uno de los roadster más aclamados de finales de los 90 y principios del siglo XXI. Bajo el capó escondía un motor atmosférico de gasolina, con 2,0 litros de cilindrada y cuatro cilindros, más potente que se vendía en Europa: el motor VTEC de 240 CV, que desarrollaba nada menos que 120 CV/litro y era capaz de superar 9.000 rpm. Un registro excepcional para la época.
Se fabricaron 2.000 unidades, que estaban impulsadas por el mismo motor 1.6 THP, de 218 CV que el resto de la gama. Sin embargo, incluían unas suspensiones ajustables que solo se podían encontrar en este modelo. Además, destacaba su toma de aire frontal y el alerón trasero que no podrían estar presentes en cualquier otro MINI. En definitiva, un modelo pensado para circular por carretera y circuito, del que quedan pocas unidades circulando.
El Porsche Cayman GT4 es una de las versiones más deportivas de la anterior generación del Cayman. Incorporaba un motor de gasolina bóxer de seis cilindros con 3,8 litros. Además, de forma opcional, podía equipar elementos útiles para rodar en circuito, como unos cinturones de seis puntos de anclaje, una jaula de seguridad, extintor…