No es poca cosa hablar de la serie DB, estilo Gran Turismo del fabricante de autos británico Aston Martin, ya que además de ser uno de los autos icónicos de la historia, es uno de los favoritos de James Bond desde la edición DB5.
La marca inglesa, sin embargo, anunció con orgullo que ha creado su modelo más bello: el Aston Martin DB11 2017. A diferencia de sus diseñadores históricos Zagato y Callum, esta vez la creación del deportivo vino a manos del diseñador en jefe, Marek Reichman, quien no dejó de lado la esencia del auto e incluyó modificaciones estéticas, distribución de elementos y motor, por lo que asegura que “cada milímetro está donde queremos que esté”.
El Aston DB11 2017 será el sucesor de producción en serie del DB9 (no del DB10 pues este fue creado para la película de James Bond y tan solo se construyeron 150 ejemplares, los cuales ya fueron vendidos). Posee una serie de modificaciones que lo ponen a la vanguardia de los Gran Turismo creados por la fábrica inglesa, con una versión mejorada del motor V12 creado para el DB7 Vantage 1999.
La estructura interna posee aluminio soldado en un monocasco, con un peso apenas inferior a 3.900 libras, casi igual al DB9, interiores más espaciosos, con acabados de ultra lujo, consola central en forma de cascada, pantalla de info entretenimiento totalmente digital, y un panel de instrumentos que incluye frenado eléctrico, descansa brazos mecánico en la parte central, y asientos controlados automáticamente para brindar mayor espacio en la parte de atrás; también contiene un touchpad en la consola central con arquitectura eléctrica de Daimler MercedesBenz.
Con un precio estimado en EE.UU. de USD 215.000, a partir de noviembre de este año, el Aston DB11 contará con un motor V12 de 5.2 litros, 600 hp de potencia y 516 lb/ft de torque, con una aceleración de 0100 km/h mejor a 4.0 s, y una velocidad máxima que llega a los 320 km/h, transmisión automática de 8 velocidades, con tres modalidades de transmisión controlables desde el panel del volante.
El DB11 también posee un sistema de optimización de motor y consumo de gasolina que desactiva un banco de cilindros a velocidad crucero, convirtiéndolo sobre la marcha en un motor de 6 cilindros lineal de 2.6 litros, modulado por demanda de torque que no puede ser detectado por el conductor, consiguiendo mejoras de dos dígitos en economía de combustible.
Sin el uso excesivo de ayudas aerodinámicas en la carrocería, el DB11 brinda gran aerodinámica sin sacrificar la elegancia característica del Aston Martin desde su versión DB2, que apareció en 1950.
La Serie DB ha acompañado al agente James Bond desde la película Goldfinger (1963) a bordo de un DB5 (1963-1967), luego en los filmes Thunderball, Golden Eye, Tomorrow Never Dies, Casino Royale y Skyfall, donde el DB5 fue destruido. Para Spectre se creó el DB10, aunque es posible que en próximas entregas el DB11 sea elegido nuevamente por el Agente 007.