No pocos son quienes piensan que el BMW Serie 3, con código de chasis E30, es la ‘Máquina Definitiva de Conducción’; incluso para aquellos compradores que llevan en mente la condición de: “solamente en búsqueda de un auto económico”.
Detalles como interiores ergonómicos para el conductor y un diseño que ha superado las barreras del tiempo hacen que su presencia haga girar la mirada de una gran cantidad de aficionados y no aficionados a los motores.
Su nacimiento, en 1962 marcó el estilo que lo convertiría en un BMW legendario, con la aparición del modelo Neue Klasse, que consistió en una línea de fabrica de la industria de autos alemana, por crear modelos sedán y coupé de carácter compacto, iniciando con el modelo 1500, que contenía el reconocido motor M10 de 4 cilindros, y que se popularizó tanto entre corredores como clientes que únicamente deseaban un auto con look deportivo, lo cual representaba una innovación en la época. La popularidad del 1500 llevó al desarrollo del 1600, 1800, 2000 y el virtuoso 2002, un auto de carreras definitivo, que además puso en boga el ‘pliegue Hofmeister’.
Tras el éxito del desarrollo del BMW 2002, el fabricante de autos se halló en la dura tarea de crear un nuevo auto compacto tan exitoso como sus predecesores, y que además fuera de la mano con el diseño de la nueva Serie 5, dejando como resultado el nacimiento de la Serie 3, con código de chasis E21, 19751983, dando lugar al nuevo sedán deportivo de la BMW, atrayendo a un nuevo segmento de compradores, sin embargo para cuando apareció el E30 en 1982, la base de fans del E21 se había establecido, pero las mejoras en suspensión e interiores permitieron que la Serie 3 sea una amplia innovación ante su predecesor.
Durante los 12 años que duró la producción de este modelo, se convirtió en el auto favorito de quien deseaba poseer un sedán para pasajeros y un auto deportivo al mismo tiempo, convertido en un favorito para competencias, el BMW E30 se fue convirtiendo en un símbolo de status para yuppies urbanos, como Blane McDonough de Pretty in Pink, que conducía uno de color rosa.
Con 2.5 millones de modelos producidos en todo el mundo demostraron que el E30 era un mercado amplio para accesorios y repuestos, así como un grupo de fans apasionados por este auto.