De ahí que Mercedes-Benz, en alianza con la compañía danesa Garia, especializada en carritos de golf, creó un modelo más acorde al siglo XXI y presentó recientemente su nuevo diseño, con muchas más curvas que el modelo clásico.
El vehículo para golf de Mercedes-Benz y Garia tiene una carrocería de fibra de carbono y un motor eléctrico de batería de iones de litio con 4 hp de potencia (3 kW); sin embargo puede alcanzar 15 hp (11 kW) y una velocidad máxima de 30 km/h.
La batería del nuevo Mercedes-Benz le permite autonomía de 80 kilómetros y se recarga en seis horas. Además la marca alemana incorporó, como en un auto regular, discos de freno y suspensión de doble pinza.
Los interiores están pensados para el lujo, con una pequeña refrigeradora, soportes para bebidas (como por ejemplo un par de copas o una botella de un fino espumante), pantalla integrada de 10.1 pulgadas que muestra información general del auto, un mapa y las puntuaciones de los golfistas durante su día de deporte.
Hasta el momento, Mercedes-Benz solo ha construido dos de estos pequeños autos. Sin embargo, una vez aprobado por sus clientes sin duda lo llevarán a línea de producción.