A continuación en PatiodeAutos.com presentamos unos consejos rápidos sobre el cuidado de los neumáticos del automóvil. Pues para limpiar las llantas es necesario tener algunos conocimientos de limpieza básicos, con el fin de limpiar de manera correcta.
Lo que nunca debe faltar para una limpieza correcta son: cepillo, guantes, cojín de lavado de rueda, jabón o shampoo para auto, cera de rueda y soplador de hojas o máquina de aspiración y soplado, esta última herramienta de limpieza puede ser reemplazada por un compresor de aire que ayude a soplar el agua que puede quedarse en la llanta.
Lo primero que debe hacer es cerciorarse que sus neumáticos estén totalmente fríos. Lavarlos cuando aún están calientes provocará que el agua y los líquidos de limpieza se sequen prematuramente y que las llantas se manchen debido al calor que emite el sistema de frenado.
Siempre es necesario tener dos cubos de agua. En el primer cubo agregue 3 o 4 chorros de jabón para llantas o shampoo para auto, después llene el cubo hasta la mitad y mezcle hasta producir ligeramente espuma. Llene el segundo cubo de agua para un correcto enjuagado. En este punto es recomendable acompañar el jabón con algún protector de arena para evitar reintroducir polvo del freno en las llantas después de enjuagarlo en la cubeta.
A continuación, remoje los neumáticos uno por uno, después aplique el jabón limpiador, asegúrese de leer las instrucciones para conocer el tiempo de permanencia necesaria para que el producto sea efectivo.
Después de este paso, espere aproximadamente 10 a 20 segundos, luego use el cepillo para limpiar la parte posterior de la llanta en sentido horario comenzando a las 12 en punto y bajando por el neumático paulatinamente, con el fin de que toda la superficie quede enjabonada. Puede utilizar cepillos pequeños o grandes, esto depende del tamaño de la llanta y de las curvaturas que presente el aro. Asegúrese de limpiar en los orificios de las tuercas y en las uniones entre el neumático y el aro.
Al terminar el proceso de enjabonado, enjuague las llantas y revise su trabajo antes de pasar al siguiente neumático.
Recuerde siempre trabajar una llanta a la vez, y no permita que el agua, o el limpiador de ruedas salpique a cualquier borde de la carrocería del auto, pues la superficie salpicada puede mancharse o deteriorarse por los agentes químicos de los productos de limpieza.
Al terminar el lavado seque las llantas con una toalla de microfibra ayúdese del compresor de aire para desalojar el agua que queda en los bordes del neumático. Recuerde no utilizar la misma toalla para limpiar la pintura del auto, pues esta puede contener polvo que raya fácilmente la pintura.
Cuando las llantas estén totalmente secas, aplique la cera sobre el aro, con el fin de proteger las llantas del polvo intenso de los frenos y para ayudar a acelerar el proceso de limpieza la próxima vez. Para la superficie del neumático (caucho) puede emplear el brillo de llantas de su preferencia. Después de seguir todos estos pasos, de seguro sus neumáticos lucirán flamantes y limpios.
No olvide que los neumáticos son el único punto de contacto entre el vehículo y el piso. Por ende es necesario mantenerlos en buen estado para garantizar la seguridad, como la movilidad de los ocupantes del vehículo.